10 hábitos saludables que te ayudarán a mejorar tu calidad de vida
Los hábitos son todas las conductas que repetimos de forma regular y subconsciente en nuestra rutina diaria. Los buenos hábitos son la base que necesitamos para tener una vida sana, los cuales incluyen hacer actividad física regularmente, tener una dieta saludable, pasar tiempo al aire libre y cuidar de nuestro bienestar emocional.
La mejor forma de incorporar un hábito en tu estilo de vida es poner recordatorios para realizar la actividad que quieras incorporar a tu rutina y elegir una recompensa atractiva que recibirás cada vez que hagas la actividad.
Sigue leyendo para aprender más a fondo sobre estos hábitos, cómo afectan tu estado de bienestar y cómo implementarlos de forma efectiva en tu rutina diaria.
¿Qué son los hábitos?
¿Qué es lo primero que haces al levantarte? ¿Ducharte? ¿Tomar café? ¿Desayunar? Todas las personas tienen una rutina matutina diferente que se repite prácticamente con exactitud cada día. Todo es cuestión de hábitos.
Los hábitos se pueden definir como comportamientos que forman parte de la rutina diaria de una persona y, por lo general, se desarrollan de forma automática, sin un razonamiento previo. Según investigadores de la Universidad de Duke, los hábitos representan alrededor del 45 % de nuestros comportamientos al día. Es decir que realizamos casi la mitad de nuestras acciones en piloto automático.
Nuestros hábitos se pueden clasificar en cinco categorías diferentes:
- Físicos: estos son todos los hábitos que se relacionan de forma directa con el cuerpo, como la higiene personal.
- Afectivos: se trata de los hábitos que están relacionados a cómo interactuamos con nuestro entorno y a nuestras relaciones sociales.
- Sociales: estos son hábitos intrínsecos de las culturas, sociedades y grupos en los que nos encontramos inmersos.
- Morales: determinan lo que se piensa que es correcto y la forma en la que puede llegar a considerarse una buena persona.
- Intelectuales: se refieren a todas las actividades relacionadas con el aumento del intelecto y el entendimiento.
La ventaja de los hábitos es que nos permiten realizar actividades sin tener que gastar mucha energía en pensarlo que se necesita para incorporar esa actividad en el día. Esto puede ser un arma de doble filo porque puedes terminar por incorporar hábitos poco saludables e, incluso, dañinos en tu rutina cotidiana sin darte cuenta.
Por esto es importante aprender a identificar qué hábitos pueden contribuir a tener una vida saludable y mejorar nuestra calidad de vida, como también cuáles pueden afectar de forma negativa el bienestar físico y la salud mental si se mantienen a largo plazo.
10 hábitos saludables que te ayudarán a sentirte bien
Los hábitos de vida saludable son todos aquellos que tienen un impacto positivo en el bienestar físico, mental y/o emocional. Incorporarlos en nuestro estilo de vida puede ayudar a prevenir enfermedades crónicas y a mejorar nuestra calidad de vida.
¡Ponlo a prueba tú mismo al poner en práctica alguno de los siguientes hábitos saludables!
Cuida tu alimentación
Una alimentación saludable es esencial para tener una buena salud, ya que te protege contra múltiples enfermedades crónicas, como lo son las enfermedades cardiovasculares, la diabetes y ciertos tipos de cáncer.
Tener una alimentación sana no es solamente comer comida saludable, también incluye comer porciones adecuadas de cada alimento, tener un consumo de alcohol moderado e incluir todos los grupos alimenticios en nuestra dieta siempre que sea posible. Tener una dieta equilibrada es sinónimo de tener una dieta sana.
Practica actividades físicas
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que las personas adultas realicen, al menos, 150 minutos de actividad física de moderada intensidad, o 75 minutos de actividad física de alta intensidad, a la semana.
El sedentarismo o inactividad física es un factor de riesgo para múltiples condiciones, como la obesidad y la presión arterial elevada. Mientras que el ejercicio físico regular es la piedra angular de un estilo de vida saludable, ya que este no solo ayuda a prevenir problemas de salud a largo plazo, sino que también mejora el estado de ánimo.
Mantente hidratado
El agua es el componente principal del cuerpo humano al representar 70 % del mismo. Esto hace que mantenerse hidratado sea sumamente importante para nuestra salud física.
Usualmente, se recomienda beber de 1,5 a 2 litros de agua al día para mantenerse hidratado, sin embargo, esto va a variar y dependerá de la temperatura del lugar en que nos encontremos y de la cantidad de actividad física que realicemos durante el día. Así que, como regla general, beber agua cada vez que sentimos sed debería ser suficiente para estar hidratados durante el día.
Duerme bien y suficiente
Un sueño insuficiente es uno de los factores de riesgo más importantes para el desarrollo de enfermedades crónicas. Los adultos deben dormir entre 7 y 9 horas cada noche, sin embargo, las horas de sueño no son lo único que se debe tomar en consideración, la calidad del sueño también es esencial para tener una buena salud y mejorar su bienestar físico y mental.
Puedes mejorar la calidad de tu sueño al tener una buena higiene del sueño, lo cual significa:
- Ser consistente con tus horarios de sueño, es decir, siempre irte a dormir y despertar a las mismas horas.
- Asegurarse de que el cuarto esté oscuro, tranquilo y a una temperatura agradable.
- Retirar todos los dispositivos electrónicos del cuarto.
- Evitar las comidas grandes, la cafeína y el alcohol antes de dormir.
- Haz ejercicio. Hacer actividad física durante el día ayuda a que te duermas más fácilmente.
Interactúa con otras personas
El ser humano es un ser social. Encontrarnos frecuentemente inmersos en alguna actividad social puede ser sumamente beneficioso para nuestra salud mental y para nuestro bienestar emocional.
Si bien cuando se habla de hábitos de vida saludable se suele resaltar el ejercicio físico y la alimentación saludable, mantener buenas relaciones sociales también es fundamental para tener una buena calidad de vida.
Busca el enfoque positivo
Una mentalidad positiva te ayudará a pasar los momentos difíciles con más facilidad. Te ayudará a seguir trabajando para cumplir tus metas, aunque las cosas no te estén yendo a tu favor en ese momento.
Intenta repetir afirmaciones positivas todos los días para entrenar a tu mente a que piense de forma positiva.
Cuida tu higiene personal
La higiene personal no solo es importante para la salud física al ayudar a prevenir infecciones, también es sumamente importante para la salud mental, nuestra autoestima y la forma en la que nos perciben las personas a nuestro alrededor.
Cuidar de la higiene personal es esencial si queremos mejorar nuestra calidad de vida.
Conéctate con la naturaleza
Las personas que tienen una buena conexión con la naturaleza suelen ser más felices. La naturaleza puede generar una gran cantidad de emociones positivas, como tranquilidad y alegría, además de aumentar la creatividad y facilitar la concentración.
No es necesario hacer un viaje a un lugar remoto para conectarse con la naturaleza, se puede crear una conexión con ella sin tener que hacer mucho esfuerzo. Es importante aprender a conectar con la naturaleza que está cerca de tu hogar en tu rutina diaria, ya sea ir a un parque o cultivar plantas en tu casa.
Alimenta las buenas relaciones
De acuerdo con Matthew Hertenstein, psicólogo americano, el contacto físico con las personas con las que tenemos vínculos emocionales, como nuestras parejas, familiares y/o amigos, es beneficioso para la salud mental al aumentar la autoestima y la sensación de paz interior, y al disminuir el estrés.
Controla el estrés
Aunque el estrés es completamente normal, el estrés prolongado o en cantidades excesivas puede generar problemas de salud y cambios en el estado de ánimo por lo que es sumamente importante aprender a reconocer cuáles son las cosas que más estrés te causan dentro de tu vida.
No siempre vas a poder controlarlo completamente, sin embargo, conocer el origen de esto puede ayudar a disminuirlo de forma parcial y a tener un plan de acción para la próxima vez que te sientas estresado.
Recomendaciones para incorporar un hábito saludable a tu estilo de vida
No es fácil reemplazar los malos hábitos por buenos hábitos, sin embargo, vale la pena hacer el intento porque la recompensa al lograrlo es bastante grande.
A continuación, te dejamos algunas recomendaciones para ayudarte a reemplazarlos::
- Fíjate un objetivo concreto: es importante ser específico al querer adoptar un nuevo hábito, por ejemplo, en vez de decidir que tu objetivo es «hacer más ejercicio», sería mucho más efectivo decidir «correr una hora todos los días».
- Divide tu objetivo en pequeñas etapas: muchas veces intentar lograr nuestro objetivo en un solo intento puede ser prácticamente imposible, por eso, es importante llegar a este gradualmente. Si tu objetivo es «correr una hora todos los días», puedes comenzar corriendo 30 minutos al día e ir aumentando el tiempo hasta que llegues a la hora.
- Define un plazo de tiempo: así como es importante que el objetivo que quieres lograr sea concreto, el tiempo en que lo quieres lograr también tiene que serlo, así evitarás alargar el proceso.
- Celebra y recompénsate: celebrar cada pequeño logro y darte un gusto cada vez que logras tu objetivo es una gran forma de hacer que todo el proceso sea placentero.
Ahora que tienes todos estos conocimientos solo te falta aplicarlos para mejorar tu calidad de vida. Recuerda que tener buenos hábitos te puede cambiar la vida por completo; algunos hábitos son más fáciles de adoptar que otros, pero lo importante es ser constante y nunca rendirte hasta conseguir lo que desees lograr en tu vida.
El camino puede ser difícil, pero siempre puedes contar con apoyo emocional de parte de nuestros expertos en Sanarai. ¡Programa tu sesión hoy y atrévete a mejorar tu vida!