10 estrategias para la solución de conflictos: guía práctica

Los conflictos son inherentes a las interacciones con otras personas, especialmente en ambientes en los que se manejan altos niveles de estrés, como los entornos laborales. Estos conflictos pueden ser perjudiciales para tu relación con los demás, así como para los proyectos en los que estés trabajando con esas personas.

Sigue leyendo para aprender cómo resolver estos conflictos de manera efectiva.

¿Qué es la resolución de conflictos?

Dentro del ámbito laboral y social siempre se dará la interacción entre personas, por lo que también se pueden presentar desacuerdos y malos entendidos. Debido a esto, es importante detectar estos conflictos y tener una estrategia de resolución de conflictos definida para mantener una convivencia sana y una buena comunicación con cada uno de los miembros del equipo o con las demás personas a tu alrededor.

La resolución de problemas es el proceso de analizar un problema y solucionarlo de la mejor forma posible. En el lugar de trabajo, se utiliza la solución de problemas para promover un entorno abierto, honesto e inclusivo. 

Si surge una situación de conflicto entre dos o más compañeros de equipo, las técnicas de resolución de conflictos en el trabajo pueden ayudarte a que cada una de las partes involucradas puedan encontrar la mejor solución, mientras se sienten escuchados y apoyados.

Con estrategias de gestión de conflictos, puedes encontrar una solución satisfactoria para cualquier conflicto que se presente en tu lugar de trabajo y en tu vida personal.

El buen liderazgo dentro de la empresa ayudará con el manejo de conflictos interpersonales y profesionales entre los miembros del equipo. Además de mantener una cultura organizacional buena y honesta.

Independientemente del tipo de conflicto que se te presente y de la causa del conflicto, hay ciertos errores cognitivos que pueden tener efectos negativos sobre la resolución del conflicto . Los más comunes son:

• Interpretaciones egoístas de justicia: este es un proceso en el que una o más de las partes involucradas deciden lo que es justo de acuerdo con su punto de vista sesgado. 
• Arrogancia: ser arrogante cuando se discute un asunto puede llevar a resultados indeseables. Si bien la arrogancia durante conflictos personales puede hacer que te sientas avergonzado después, cuando esta se presenta durante un conflicto laboral, las consecuencias pueden ser mucho más severas.
• Escalada: las tácticas de escalada pueden prolongar un conflicto por más tiempo del que es necesario. La escalada puede implicar aumentar las consecuencias del conflicto, mencionar problemas adicionales que no están relacionados con el conflicto actual o incluso convertir el conflicto en una disputa legal, en los casos más severos.
• Evitación: esta es la práctica de eludir un conflicto. Esto se puede ver como guardar tus emociones, cambiar el tema cuando se menciona el conflicto o retirarse físicamente de la situación.
• Culpar: esta es una táctica en la que una o más partes se liberan de la responsabilidad de un desacuerdo, al poner la culpa en otra persona. 
• Volatilidad emocional e insultos: este es uno de los errores cognitivos más comunes y destructivos que se pueden encontrar en la resolución de situaciones conflictivas. Cuando una o más personas deciden infligirle daño emocional o físico a otra persona, la posibilidad de resolver un desacuerdo de forma calmada y razonable disminuye de forma drástica.

Además, la volatilidad emocional crea un entorno hostil y los insultos hacen que la otra persona busque retirarse completamente de la situación, sin encontrar una solución para esta. 

Beneficios de la resolución de conflictos 

Aprender a solucionar conflictos de manera efectiva puede consumir mucho tiempo y energía, por lo que es esencial entender por qué esta habilidad es tan importante. 

Los beneficios más resaltantes de la resolución de conflictos son:

Construye y mejora tus relaciones

Las relaciones interpersonales y laborales suelen sufrir cuando hay conflictos sin resolver. Si un grupo de personas tienen problemas para resolver su conflicto, estos sentimientos pueden resultar en comportamientos explosivos y resentimiento a largo plazo.

La comunicación efectiva, inteligencia emocional y empatía son elementos cruciales para la resolución de conflictos, aumentando el buen funcionamiento y la satisfacción que se obtiene en todas las relaciones, ya sean laborales o personales. 

En vez de desechar una relación después de un momento desagradable, discusión o conflicto, puedes utilizar estrategias de resolución de conflictos para ayudarte a fortalecer estas relaciones y evitar estos conflictos en el futuro.

Cumplimiento de metas

Lidiar constantemente con conflictos no resueltos puede ser un obstáculo en el camino para alcanzar tus objetivos, especialmente en las relaciones laborales. Cuando se tiene un conflicto en el lugar de trabajo, la productividad suele disminuir. Esto pasa porque es más difícil concentrarse o trabajar juntos en un proyecto cuando hay un conflicto subyacente.

Para cumplir tus metas personales y profesionales, es importante usar habilidades de resolución de conflictos, como la capacidad para llegar a compromisos, negociar o seguir adelante después de que se tenga un desacuerdo.

Aumenta el compromiso

Las personas se suelen hacer más cercanas después de lograr resolver un conflicto que había entre ellas. La mejor manera de lograr esto es al atacar los problemas como equipo, en vez de atacarse unos a otros. Esto logra aumentar el compromiso de todos los miembros del equipo con el proceso y evita que las personas involucradas en el conflicto se sientan a la defensiva.

Aunque los conflictos pueden ser destructivos, también pueden ser una señal de que el equipo tiene un compromiso fuerte y apego emocional con el proyecto. Al abordar estos sentimientos, cada persona puede tener un mejor entendimiento de las metas de los demás, con lo que se puede lograr más dedicación y lealtad en el futuro.

Generar nuevas percepciones

Si bien la resolución es importante, la causa del conflicto también lo es. Cuando las personas tienen perspectivas diferentes, esto puede abrir la puerta a nuevas ideas, innovaciones y maneras de resolver un problema técnico.

Las estrategias de resolución de conflictos están diseñadas para evitar la escalada de los desacuerdos, al mismo tiempo que se discute cada punto de vista y se llega a una conclusión. Resolver conflictos te da las herramientas para aprender de otros, y para enseñarle a los demás, tanto en el ámbito personal como en el profesional.

10 estrategias para la solución de conflictos laborales: guía práctican conjunta

La resolución de conflictos es un proceso complejo que necesita de la implementación de diferentes estrategias para que se pueda lograr de manera correcta. 

Estas son algunas de las mejores estrategias para la resolución de conflictos:

1. Escucha activa

La escucha activa es un elemento esencial en la resolución de cualquier conflicto. Esta es una práctica en la que te enfocas en lo que dice la otra persona, para luego incluir o parafrasear la esencia de lo que dijeron cuando expresas tu punto de vista.

Las habilidades de escucha activa facilitan las discusiones y aumentan el entendimiento, al hacer que ambas partes se sientan escuchadas.

2. Afirmaciones en primera persona

Las afirmaciones en primera persona se utilizan para evitar culpar a la otra persona o hacer acusaciones injustas cuando se tiene un conflicto con otra persona. Esta estrategia funciona porque en vez de decir que la otra persona actúa o se siente de cierta manera, se intenta abordar el conflicto con afirmaciones que hablan de tu propia experiencia.

3. Regulación emocional

La regulación emocional se usa para evitar la volatilidad emocional y los insultos cuando se resuelve un conflicto. Al emplear la inteligencia emocional y tener expectativas adecuadas, se puede llegar a un acuerdo de manera tranquila sin dejar que las reacciones emocionales tengan un impacto sobre el resultado.

4. Comunicación

Las habilidades de comunicación efectiva son la base de la resolución de conflictos y de las relaciones saludables, junto con la escucha activa. La comunicación apropiada y clara ayuda a resolver problemas personales y profesionales, y también puede ayudar a prevenir que situaciones similares sucedan en el futuro. 

5. Asertividad

Aunque parezca contradictorio, niveles razonables de asertividad pueden ser beneficiosos cuando esta se da de manera calmada. La asertividad hace que las personas expresen sus sentimientos y sus expectativas, en vez de evitar el conflicto.

6. Disculpas

En muchos casos es necesario que el paso final de un proceso de resolución efectiva de conflictos sea disculparse. Una resolución efectiva de un conflicto logrará que las partes involucradas entiendan completamente lo que han hecho y por qué es necesario disculparse. No se trata de disculparse para terminar el conflicto rápidamente, es disculparse si piensan que realmente es necesario.

7. Modelo de intercambio

Este es un modelo de resolución de conflictos cuyo principio clave es no intentar tener la razón y asumir la responsabilidad de tus propias acciones. Este modelo tiene varios beneficios, los más resaltantes son:

• Fomenta la comunicación abierta y el interés en el punto de vista de la otra persona.
• Crea una estructura para aprender de los errores y resolver conflictos futuros.
• Resalta lo importante que es asumir la responsabilidad de tus errores.
• Ayuda a identificar que hay más de una perspectiva o solución válida.

8. Solucionar el conflicto en privado

Cuando se tiene un conflicto con un miembro de un equipo o con una persona en tu vida personal, no es necesario que el resto de las personas presentes se involucren en el conflicto. 

Resolver el problema en un lugar privado, solo con las partes involucradas en el conflicto y el mediador, ayuda a que las personas se sientan seguras y compartan sus sentimientos de una forma más abierta y honesta.

9. Entender cuando el conflicto supera tus capacidades

Parte de solucionar conflictos de manera efectiva, es saber cuándo se necesita ayuda de una persona con más experiencia en el campo, como lo puede ser un miembro de recursos humanos o un psicólogo.

10. Hacer seguimientos

Después del conflicto inicial, se pueden tener conversaciones, mensajes o llamadas de seguimiento para asegurarse de que el conflicto se haya resuelto completamente, esté en proceso de resolverse o que no hayan surgido nuevos conflictos derivados del conflicto inicial.

El objetivo de la resolución de conflictos es encontrar la mejor solución que logre satisfacer a ambas partes del conflicto. Aunque esto no siempre es posible, deberías utilizar todos los recursos que tengas a tu disposición para lograrlo.

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